Las personas humanas, contrariamente a los animales, tendemos al hijoputismo, eso está más claro que el agua. Lo que ocurre es que las personas humanas que además tienen estudios tienden al hijoputismo ilustrado. Esto no es nuevo, el mundo es siempre lo mismo una sucesión de personas hijoputistas que se van muriendo y son sustituidas por otras igualmente hijaputescas, con diferentes grados de preparación.
Ahora en Europa tenemos la generación hijoputista mejor preparada, la que más estudios tiene, la mejor, la más hijadeputa, con acento en la 'p', como saliendo a borbotones y bruscamente del labio: hijodePuta.
Bien, pues las personas guays e hijaputistas fervientes creen que todas las demás, sin excepción (incluso familiares cercanos), tienen alguna falta de carácter, que suelen clasificarlas en dos:
- deficientes mentales (anteriormente llamados tontos)
- deficientes psíquicos (anteriormente llamados locos)
Los cuerdos listos se quedan mirando al tonto y al loco cuando pasan, y se ríen y les hacen bromas, en la seguridad de que el tonto no puede hacerles nada, porque no llega al nivel de hijoputismo, pero con el loco...
El loco dice de los cuerdos cuando pasa: "Partida de gilipollas", y los cuerdos se lo tienen que tragar, se van a su casa y se echan la siesta. Por la noche no paran de darle vueltas a la cabeza sobre si el hijoputismo es incompatible con la locura...
... el bicho acecha...
En el documental de Riefenstahl El triunfo de la voluntad todo queda sumido en la derrota humana, todo bajo la sombra del águila.
Ese bicho...
El desfile guerrero de los marciales militantes nazis en Nuremberg, en 1934 es uno de los espectáculos más extraños del siglo XX... cómo se parece a las Olimpiadas... las banderas, los uniformes, los himnos, la gente llorando por su patria... todo muy deportivo.
La casa de ropas, trapos y estilo de vida Benetton se distinguió en el pasado por firmar campañas de publicidad agresiva bajo el tinte de 'lo social', intentando conjugar la venta de sus productos y su marca con la agitación de las conciencias humanas. Mmmmm... me pareció mal al principio, bien después. Ahora yo me dedico a hacer lo mismo, cambiando el mensaje.
Es como todo, las esencias permanecen, la muerte, los políticos, la explotación, la violencia y las dictaduras siempre son las mismas, es el envoltorio lo que cambia.
El presidente del Imperio ha menospreciado la ayuda española en la invasión de Iraq, agradeciéndole los servicios al resto de países implicados en su lucha contra el Mal. Como en España los ciudadanos han decidido pegarle una patada en su orgulloso culo a su amigo Ánsar y por tanto la retirada de la Alianza Invasora por el Bien, el Bush éste dice que "España se ha rendido al terrorismo". Es lo que tiene ser el mamporrero del amo, que el amo te quiere para que le limpies las botas a cambio sólo de permitirte que vivas en la ilusión de que eres alguien y te hagas fotos a su vera, cuando en realidad eres lo más patético del mundo, mamporrero del señorito. Que asco das, Ánsar, das mas pena que tu amo Mr. Marshall.
Cuando en los años 50 del pasado siglo España las pasaba putas en el régimen franquista, el grandioso Luis García Berlanga derivó el encargo de una película que trataba de lanzar a la folklórica Lolita Sevilla en otra cosa completamente distinta y personal: Bienvenido Mister Marshall, una increíble sucesión de escenas surrealistas y socarronas sobre las bienaventuranzas de la ayuda americana a la devastada Europa y la facilidad de los españoles para adaptarse a todas las situaciones, aun a costa del sentido del ridículo.
Hace poco, por 6 ebros daban junto al periódico El País esta peli en formato deuvedé. Yo he tenido la suerte de verla incluso en pantalla de cine, y creo que siempre que vuelvo a verla le encuentro más y más razones para considerarla genial obra maestra de un director irregular y honesto. Hay otras pelis de Berlanga igual de geniales, pero también me he tragado cada bodrio de agárrate. Es lo que tiene el genio, que es imprevisible.
En París-Tombuctú, por ejemplo, las breves escenas de Juan Diego en pelota viva y el final con el perro resbalando en los restos del arroz de una paellera justifican toda la peli. En Bienvenido... la escena del Saloon con Pepe Isbert mascando un ingés macarrónico en su enfrentamiento a Manolo Morán es de lo que no he visto nunca más. Y el cojo que representa a España, rezagado en el desfile... Y todos los personajes.
Esta peli deberían ponerla como examen en Secundaria, es mucho más importante saber Berlanga que saber la Biblia, el Corán y paparruchas así. Por lo menos con una película de Berlanga en la mano no conozco a nadie que quiera matar al prójimo.
No se por qué siempre he asociado el invierno y el otoño a los colores que me gustan: pardos, grises, marrones, canelas y mostazas, azules oscuros, verdes... La primavera y su manida explosión de los sentidos me parecía cosa ordinaria para aburrirse en grado sumo, sobre todo si uno tiene la mala suerte de asistir a lo largo de su vida a la repetición incesante de las siguientes primaveradas:
- Estreno de vestimentas horteras, a ser posible de colores chillones que hagan ver que tenemos el gusto y el dinero adecuado para adaptarnos a revolución sensual de esta estación del amor, etc. y dejamos de lado el oscuro y frío invierno. ¡A follar todos y todas!
- Paseos multitudinarios, si puede ser pisando las cacas de los perritos del prójimo, mejor. Por cierto, el Ayuntamiento de Madrid, además de motocacas, va a inaugurar un sevicio de investigación tipo CSI-Chamberí para descubrir el ADN del dueño incívico de los canes cagones.
- Adolescentes haciendo el gallito delante de las adolescentas (o haciendo el caballito delante de los guardias), siempre para demostrar su radiante juventud antes de partirse la columna vertebral, eso si, con el mayor estruendo posible.
- Corridas de toros, niños tocando el tambor y la trompeta durante los diez días de la semana santa, tiempo de perdón, golpes de pecho y borracheras en nombre del dios.
- "Al ricooooooo bombón heladooooooo", grita durante la siesta el del carrillo de los helados, avisando de que, aunque hoy hay una tormenta de cojones, sería bueno para nuestra garganta.
- Cine de verano, terrazas de verano y botellones de verano, todo ello, por supuesto en la zona justo en la que vives y siempre en primavera (porque en verano, que es cuando tienes vacaciones, te vas y no puedes disfrutar de las borracheras y medadas de los prójimos en tu puerta).
... Y hay muchas cosas más que ya ire diciendo, ahora mismo estoy pasando por la crisis del fin de mi querida estación invernal: ya es primavera en el corte inglés, primavera por cojones.
...
Me estoy intentando acordar de algún chiste, para animarme, pero no consigo recordar ninguno. Me gustan mucho los chistes, pero es que tengo una especie de 'amnesia humoril'. Por no salirme no me sale ni la sonrisa. Debe ser que soy un bicho, y esto es un mecanismo de supervivencia. O lo contrario, yo qué se.
Gente a la que admiro son los que hacen de la risa su profesión, y le abren a uno la mente, sobre todo los del tipo Monty Python, humor negro y bestia. Cuando los atentados de las torres gemelas me llegaban decenas de chistes sobre el atentado, gráficos, animados, flash, texto... Le encontraba poco chiste, pero ahora... ahora no me hace ninguna gracia, porque nada me hace gracia.
Así que nada, a esperar. Como decía más abajo, post tenebras spero lucem.
Parafraseando a John Reed, los cuatro días que van del jueves al domingo pasarán a la historia, paradójicamente, como la demostración de que el pueblo español está más vivo que nunca. Los medios de comunicación internacionales han estado extraordinariamente pendientes de la evolución de los sucesos y acontecimientos que se daban aquí de una forma que sólo tiene precedentes en los tristes momentos de la guerra civil o de la transición democrática, más que nada porque lo que en España pasa puede tener importantes consecuencias para el resto del mundo.
Las demostraciónes públicas de dolor, rechazo, unidad y solidaridad entre los ciudadanos (haciendo cola para dar sangre, manifestándose por millones en la calle, etc.) han servido como esperanzador ejemplo de lo que debe primar en una situación catastrófica como la del jueves. Las siguientes jornadas han estado marcadas, por el contrario, por la confusión y el caos. Las disputas sobre la responsabilidad y la gestión gubernamental de la información sobre las investigaciones tenían como trasfondo las elecciones del domingo, y es evidente que esa división se ha trasladado al resultado de las urnas. Se pueden hacer muchas valoraciones, de todo tipo, y es conveniente darse cuenta de la importancia de estas jornadas, de estos cuatro días de relámpago, para que sirvan de ejemplo a los dirigentes políticos en el futuro. A toro pasado y reestablecida la calma, que cada uno sea autocrítico y saque sus consecuencias.
Tengo la costumbre de leer periódicos, en papel o por internet, para irme enterando de las cosas. Así, desde las primeras horas del atentado, estuve leyendo prensa de todo el mundo para ver cuales eran las valoraciones por ahí. La confusión de los primeros momentos dio paso a la indignación, a la rabia, y posteriormente a valoraciones más calmadas. Pero desde hace tiempo prefiero leer las opiniones de aquellos que no coinciden en sus ideas con las mias. Leí lo que decía ETA a través de su periódico, y comencé a sospechar que lo que parecía ser obra de ETA podía no serlo, fundamentalmente porque el Gara no acostumbra a decir una cosa y hacer otra, por muy brutal que sea. Otegui, creo, sabía que ETA no era la responsable porque Otegui es ETA, y este atentado sería su fin. Era una simple cuestión de sentido común y autosupervivencia, como todos los bichos. Lo siguiente fue un enfrentamiento mediático y una cadena de rumores, verdades a medias y opiniones de sangre caliente. Todos albergábamos la esperanza (triste, pero es así) de que si fuera ETA, al menos esto causaría su fin definitivo. Pero si fuera el otro terrorismo, el islámico, la situación (se quiera reconocer o no) es muy distinta, porque no sería el final sino el principio.
Eso es lo que provocó la furia y la indignación, que una cosa es lo que el gobierno o los ciudadanos desearan, y otra muy distinta lo que sucedió en realidad. En la realidad, España ahora es objetivo de la guerra santa islámica contra occidente. No entro a valorar la responsabilidad de esta situación me parece que cada uno expresó su idea de lo sucedido en las urnas como había que hacerlo, dándole confianza al gobierno o no.
Tampoco valoro a Aznar. Se va con el palo brutal de la derrota inesperada por unos acontecimientos vertiginosos que deberían hacer reflexionar mucho al PP, autocrítica que deseo por el bien de la democracia y de los gobiernos del futuro, sean del signo que sean. Lo que si valoro es lo que he leído estos días. Ayer en 'El Mundo' Albiac, Gómez Marín y otros echaban pestes de los españoles por haber votado como lo han hecho. Leed las columnas, a mi me han producido mucha desazón. Entre otras cosas, dicen que España (los españoles, no el gobierno) se ha rendido al terrorismo, que los ganadores son AlQaeda y ETA y cosas así.
Por último y pidiendo perdón por la parrafada, he sido uno de los votantes del PSOE que antes, durante muchos años, se ha abstenido. Siento la victoria de Zapatero como propia, pero no le doy mi plena confianza de votante sin condiciones. Si cae en los mismos defectos que el anterior gobierno socialista, me quedo en mi casa y en paz.
[ Lo anterior es un extracto de un mensaje que puse ayer en un foro, con el único ánimo de dar mi opinión sobre los acontecimientos de la última semana, intentando no molestar a nadie, no contribuir a enmierdar más la situación, reconociendo que uno es humano y se equivoca la mayoría de las veces que habla. El ser humano es el único bicho que mata por placer ]
...
[ Un amigo mío de Vitoria decía que la poesía es lo que salvará el mundo. Nos reíamos de su inocencia al decir cosas como esa. Ahora se que tiene toda la razón, sólo encuentro respuestas en los versos de personas que han visto lo que yo ni me imaginaba. Esa es su grandeza ]
...
[ Tampoco me salen muchas ideas ahora (bueno, ni ahora ni nunca), por eso pongo esto, entre otras cosas, para ejercitar los dedos, para recordarme dentro de unos meses qué pasaba por mi cabeza y para volver a ilusionarme con algo y levantar la vista ]
Recuérdalo tú y recuérdalo a otros,
Cuando asqueados de la bajeza humana,
Cuando iracundos de la dureza humana:
Este hombre solo, este acto solo, esta fe sola.
Recuérdalo tú y recuérdalo a otros.
...
Que aquella causa aparezca perdida,
Nada importa;
Que tantos otros, pretendiendo fe en ella
Sólo atendieran a ellos mismos,
Importa menos.
Lo que importa y nos basta es la fe de uno.
Por eso otra vez hoy la causa te aparece
Como en aquellos días:
Noble y tan digna de luchar por ella.
Y su fe, la fe aquella, él la ha mantenido
A través de los años, la derrota,
Cuando todo parece traicionarla.
Mas esa fe, te dices, es lo que sólo importa.
Gracias, Compañero, gracias
Por el ejemplo. Gracias porque me dices
Que el hombre es noble.
Nada importa que tan pocos lo sean:
Uno, uno tan sólo basta
Como testigo irrefutable
De toda la nobleza humana.
[Luis Cernuda: 1936]
Yo hasta hace poco era un abstencionista activo, y a mucha honra. Todo el mundo me decía que era un gilipollas (me lo siguen diciendo, aunque vote, asi que da igual), que no tenía ningún derecho a protestar porque no votaba, que no era de izquierdas, sino un anarca de pacotilla y sillón. Cuando he vuelto a votar, ¿ha servido de algo?. Noooooooo, las promesas de vivienda barata y contratos dignos son más mentira que los certificados de estudios de Rappel.
En las elecciones del domingo hay unos cuantos partidos bastante curiosos: Uno de ellos se presenta al Senado, tienen un ideología muy extraña y confusa, pero un logotipo de Max que me encanta. Se denomina Ciudadanos Agobiados y Cabreados. Otro es el Partido del Karma Democrático.
Es una pena que éstos últimos cachondos sólo se presenten en Vizcaya, pero por lo menos tienen una web donde se puede participar en su concurso de retoque de carteles, para que nuestro cerebro no se llene de mítines y banderitas.
Un ciudadano, un photoshop, la democracia perfecta. ¡Menos promesas y más retoque, joder, como en Corporación Dermoestética!
Las fotografías en blanco y negro son, desde hace más de 150 años, los documentos notariales de la realidad. La convulsión que provocó este invento a lo largo del siglo XIX entre el mundo científico y artístico fue tal que la única defensa que se les ocurrió a los letraheridos para mantener su estatus en el monopolio de contar la realidad es que una palabra valdría, siempre, más que mil imágenes, por muy reales que fueran éstas.
Recuerdo con sorpresa la primera vez que vi imágenes de Hitler en color, acostumbrado a los documentos gráficos, películas, fotografías del nazismo en blanco y negro. Creía que eran un montaje, una falsedad, los colores ocres del uniforme, las banderas de fondo rojo con la esvástica, la cara del monstruo con sus tonos rosados, igual que la de las personas...
El blanco y negro no sólo era el pasado o el arte, era la constatación de lo lejano de aquellos tiempos, la muerte misma. Las escalas de grises difícilmente se pueden asociar a la novedad o la actualidad. Sólo cumplen el papel de vestigio arqueológico de una época que no deseamos que vuelva, pero que siempre se repite. Haider ha vuelto a vencer en una región austriaca, los clérigos protestan en Iraq y firman una constitución medieval que debería marginar más aún a las mujeres, según los dictados coránicos, los malos tratos siguen, las matanzas, las guerras civiles. La sangre no termina de manar de las venas de la historia, no aprendemos una mierda, aunque lo real sea en colorines e inmediato, igual que en el Planeta de los Simios.
El blanco y negro siempre vuelve.
Dividir a la gente en dos grupos, categórica y científicamente, siempre me ha hecho mucha gracia. Como hacen los profesores de la universidad, sentenciando desde su sillón, pipa en mano, poniendo continuamente post-it amarillitos al voleo en páginas que nunca leen, pero que queda muy bien delante del alumnado.
Yo también divido al mundo en dos, pero en muchas categorías. Nada absoluto ni científico, todo relativo y leve. Para decir tonterías hace falta estudiar mucho.
El mundo se divide básicamente en dos (llamémosles A y B), pero siempre hay una excepción porculera (llamémosle C) que echa por tierra mis teorías y me obligan a seguir comiéndome la cabecita con la taxonomía humanoide:
- Los que mueven la cucharilla del café hacia la derecha (A) y los que lo mueven a la izquierda (B), aunque también hay gente (C) que no bebe café, vaya por Dios.
- Los que están básicamente vivos y los que están básicamente muertos (pero también hay zombis, o eso dicen).
- Los que se levantan de la cama con el pie derecho y los que se levantan con el pie izquierdo (aunque también hay gente que no duerme, o que duerme con los ojos abiertos, como los conejos).
- Los que beben Coca-cola y los que beben Pepsi (aunque una vez me encontré en Campillos un tío que fabricaba su propio refresco, la Katana, creo que por antiamericanismo o egocentrismo o alguna palabra terminada en ismo)
- Los que tienen pelo y los que son calvos (pero también están los que llevan peluquín).
- Los que chupan el capuchón del boli y lo mascan y le hacen de todo, y los que cuando ven un boli mascado por otro buscan rápidamente un boli medio nuevo (aunque hay quien prefiere la goma de borrar de los lápices).
- Los que viven de día y los que viven de noche (pero hay quien no se levanta de la cama y no sabe si es de día o de noche).
- Los que votan a Rajoy y los que votan a Zapatero (aunque hay quien vota a otros, o directamente se abstiene).
- Los que blasfeman en público y los que blasfeman en privado (aunque hay personas mudas).
- Los que se cagan en Dios y los que se cagan en Alá (aunque hay gente que se caga también en otros dioses).
- Los que tienen que pagar una hipoteca por un piso de mierda de por vida currando como cabrones y los que no dan palo al agua y se llevan los dineros de esas hipotecas (aunque hay también gente que no tiene casa).
- Los que están hasta los huevos y los que están hasta los ovarios (aunque... bueno, aquí me parece que no hay excepciones).
Hay muchas más clasificaciones binarias de estas, pero ahora mismo no me acuerdo de todas (estarán por ahí guardadas en una libreta de anillas de esas que se comen los jerseis) porque tengo que decidir si tomarme un lexatin o un ... bueno, que no me acuerdo.
Una vez me dijeron que los esquimales, los inuit, tienen en su lengua 250 palabras para nombrar los distintos matices del color blanco, y cientos de términos para asociarlos a abstracciones como la pureza, la verdad, etc.
Otra vez me dijeron que los habitantes del desierto de Kalahari poseen igualmente centenares de palabras que se relacionan con los colores ocres y su forma de vida en la tierra seca, la recolección, la caza, la supervivencia.
Las palabras son eso, sentidos, olores y colores, restos de la memoria de los antepasados. Cada día se pierden unas cuantas docenas de idiomas en todos sitios por extinción de las etnias que los hablan. Con ellos se pierden mundos enteros. Luego va CocaCola y vende agua del grifo envasada en botellas de diseño a 3 el litro. Te venden lo que ya tienes con otras formas, adaptadas a las exigencias de un mundo mudo y pequeño, cerrado y simple. Transparente como el agua del grifo, pero a precio de oro. Ese es el futuro.
Los periódicos de este fin de semana venden sus candidatos en la portada de los suplementos dominicales, que es la única parte del periódico que lee la mayoría de la población, las fotos en color, los muñequitos, soltando ideología entre los consultorios sentimentales y las recetas de nouvelle cousine y demostraciones de decoración de apartamentos chic para parejas modernas y con posibles. Presentas sus armas, dejando claras las preferencias en lo económico, en lo político y en lo sentimental, que todo es lo mismo.
El País pone en su portada del semanal a ZP de perfil, acompañado de su esposa, intentando dar la imagen de una persona sencilla y natural, sin posado aparente. El Mundo pone a su candidato Rajoy, de frente, posando, dejando claro quien manda aquí. Los otros periódicos hacen o harán lo mismo, cada uno presenta hagiografías de sus amos.
Cada mochuelo a su olivo, que viene la feria de las promesas y el reparto de sillones.