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15 de Septiembre de 2005

Escuela de Geografía Real

Aquí en España vuelven los niños a la escuela tras el periodo de descanso veraniego. Salen los padres muy contentos en la televisión, porque por fin van a descansar de verdad de tanto niño y tantas carreritas por el salón y tanta vida. Uno piensa que todos los que, sin vergüenza ninguna, expresan al resto de borreguitos televisivos su perra vida de guardianes-niñeros y echan pestes del gamberreo continuo de sus propios hijos serán todos miembros de las sectas anti-condón, y que su descendencia torturante es fruto del castigo divino, no de la voluntad paterna. Hay otros métodos más eficaces para quitárselos de enmedio, queridos paters amargados, el castigo físico, las palizas, la cámara de gas, matarlos de hambre, etc.

Eso es lo que Uno piensa ahora, probablemente cuando sea padre comerá huevos, y más vale pájaro en mano que ciento volando, etc...

Escuela Real

A los chiquillos, por su parte, esto del colegio les da igual, saben que la mitad de las cosas que van a aprender no sirven para nada. Si siguen yendo es porque en su casa se aburren, y para ver a los colegas (y a esa compañera de 3ºA que está como el lomo).

-Hola, vengo buscado trabajo honradamente, hablo seis idomas y soy licenciado en tres universidades".
-¿Licenciaqueeeee? Sí, hombre, pa eso contrato analfabetos, que me salen más baratos y menos protestones. ¡Vete de aquí ahora mismo, honrado fracasao, que no tienes un puto Porsche donde caerte muerto!.

Niños, sabedlo bien: ni las carreras, ni la lectura, ni la geografía, ni la historia, ni la literatura sirven para nada. Si acaso las matemáticas, por aquello de contar el dinero y por conocer de antemano el precio de los cubatas en los puticlubs. Un niño sabe perfectamente que, si quiere progresar, debe dedicar sus esfuerzos e industrias al tráfico de esclavos, armas o droga, a robar coches de lujo, a especular con los terrenos y la vivienda, a la estafa bancaria de pequeños ahorradores, a ejercer de comentarista de sociedad o de la pelota, a envenenar a sus vecinos, a colgar en internet fotos porno de sus hermanas pequeñas, a presentarse a las elecciones y ganarlas, a ser respetado, en suma.

Ni los maestros quieren estar allí ni ellos tampoco, así que lo mejor sería que se cerraran las escuelas. Pero claro, los padres y el gobierno dirían que nanay de la china, que tres millones de pre-delincuentes campando a sus anchas por la calle causarían más destrozos que el Katrina en Nueva Orleans.

Niños, rebeláos, exigid una escuela que sirva para el futuro y que no os engañe nadie, nada más que vosotros mismos.

Trapo | Enlace permanente | Categoría: Opinar

Comentarios

Mire usted, Mr. Trapo:
A los adolescentes les pasa una cosa que se llama pubertad (crecimiento del pito, las tetas y muchas ganas de masturbarse). Ello les lleva a pensar que son más listos que los viejos. Por esta razón hay que reprimirlos en instituciones formativas como la escuela, la universidad, etc... para que un día tengan una familia y no se metan en lo de Al Queda.

Escrito por Pistacho Antichivatos a las 15 de Septiembre 2005 a las 03:06 PM
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