Siguiendo la recomendación de Arcadi Espada, leo una larga lista de cosas que la gente considera placenteras e imprescindibles en su vida cotidiana. El artículo colectivo se llama Mis tres placeres del día, y se publicó en la revista 'El Ciervo'.
En realidad es un autorretrato de cada persona. 'Autorretrato' es una palabra extraña. A mí me suena a retrete, debe ser porque en los dos casos remite a la intimidad y a la desnudez, a la parte animal previa a las convenciones sociales. ¿Y retrete? ¿A qué suena? Pues, curiosamente, a mí me parece que se asocia a cuarto de baño sucio, poco recomendable, pero prefiero mil veces esa palabra proletaria y de dudoso gusto a las alternativas higiénicas y pijas: toilette, excusado, servicio, wáter (ésta al menos es igualmente cutre).
Mis tres placeres terrenales, los que me retratan, podrían ser:
- Comerme un buen mollete tostado, a medio cocer, por la mañana temprano, primero la parte de abajo, después de de arriba, que es la buena.
- Dormir una siestecilla breve después de comer sin que haya ruidos de motos ni de vecinos jaleosos.
- Encontrar por sorpresa cosas que creía perdidas y que echaba de menos, incluídas personas.
Y alguna cosa más, cariños y eso, sobre todo en estados carenciales.
A veces nos complicamos la vida un montón. Los placeres sencillos la mayoría de las veces son los que más no llenan. Satisfacer las necesidades primarias es lo que más nos llena de gusto :P
Escrito por MALAPUTA a las 13 de Abril 2005 a las 07:28 AMasdfasdfasdf
Escrito por dasf a las 13 de Abril 2005 a las 01:13 PM