Compruebo con estupor que existe la posibilidad de poder ir pagando a plazos un nicho para enterrar a una mascota, antes de que estire la pata definitivamente, es decir, en vida. Hay que ser prevenido, que lo que no puede ser es tirar a los animalitos por el wáter o meterlos en una caja de galletas Cuétara y dejarlas en el contenedor de los muebles. Mucho más higiénico esto, propio de la civilización.
De esta forma, uno se puede acoger a los beneficios de dicha oferta mientras le acaricia el lomo o le pone de comer su ración de friskas: "Todo cliente que efectúe una contratación anticipada para su animalito en los sectores de Pino o Palmeras, tiene un muy buen descuento sobre la tarifa plana". Igualito que Terra, de ahí lo de en-terrar, será.
Y de paso, pensar que nuestra mascota pasará a mejor vida rodeada de jadincitos y silencio, en un lugar de lujo para amos exigentes y de alto standing, una solución para aquellas personas que confían en que su compañero/a fiel irá directamente al cielo de los bichos, justo a la diestra del Padre, conforme escupes al fondo.
Ya hace tiempo que me mosqueban los cobradores de los entierros a plazos, a pagar en cómodas letras en vida de los futuros fiambres. Que eso es lo que somos, ataudes con patas e hipotecados. Porca miseria, que decía mi gato cuando le ponía las sobras de la paella.
algunas veces la vida es como las almendras jodidas: amarga.
demasiado palo tu post de hoy, trapo...
o demasiado real.
en fin. tendrá que ser así.
Escrito por El Abuelo Cascarrabias a las 24 de Noviembre 2004 a las 12:33 AMPues a mi perro lo tiraré a la basura. Si lo quiero mucho, pero... pa que´lo voy a enterrar...nuse
Escrito por Akila a las 24 de Noviembre 2004 a las 03:55 PM¿¿A la basura?? Madremía...
Escrito por Xènia a las 27 de Noviembre 2004 a las 02:01 AM